Se presenta con una fórmula nueva al menos eso asegura la
flamante nueva cara de La Sexta, y ex del ente público, Ana Pastor. Nueva en
cuanto al contenido, en la nota de prensa se asegura que aquí no hay opinión ni voces que suben el tono por
encima de la línea del respeto como sucede en otros espacios del panorama
televisivo.
En este nuevo objetivo se pretende dar o quitar la razón a
las voces de la esfera política tirando de hemeroteca y basandose en criterios objetivos. Aquí no caben los matices, la tertulia, el
análisis ni el careo masivo al que nos tienen acostumbrados por cierto en
programas de la misma cadena, sino el frio dato que según por quién sea leído,
tendrá una valoración u otra. La realidad hoy en día es que la objetividad
cuenta más de la persona que la cuente, aunque los medios vives como ese
reconocimiento cada vez queda más lejos, por acercarse al juego de mezclar
información mezclada con opinión, por moverse por intereses económicos y
empresariales (véase la mediática entrevista a Aznar en los informativos del
grupo Atresmedia) .
El objetivo de Ana Pastor puede parecer presuntuoso aunque habrá
que esperar a ver como se desarrollan los acontecimientos para ver si la
incisiva periodista consigue su propósito. Aunque creo que a los programadores
del canal el número y la objetividad que más van a valorar va a ser la de los
frios números que la audiencia les reporte en su estreno.