miércoles, 22 de agosto de 2012

¡Me voy a Tanzania!

¡Shit! Me digo a mi mismo.

Otra vez ese estupido programa de españoles en..... Tanzania. No es que tenga yo nada en contra de la población tanzaniana, pero ya vale. Todos los días poniendo al personal los dientes largos porque, por lo visto, el único país donde no se vive bien es en España. Paradojas de la vida, oiga, ya que todos pensabamos que los alemanes, ingleses y demás guiris se venian a nuestro país por nuestro estupendo clima, maravillosas playas y demás parafernalia turística.



Pues harto de ver lo bien que vive la gente por ahí fuera  me voy a hacer una mochila con todo lo necesario para ser un español feliz de esos que veo en ese programa y que a veces tanto detesto. Como documento identificativo me llevaré mi tarjeta del paro (Mucho más valido en nuestro país que en cualquier otro) y que te vale para obtener algún descuentillo para cualquier festival que se precie. (Pensándolo bien en Tanzania no habrá mucho festival, por lo que deshecho esta idea).

Aunque a veces ponga en duda todo el sistema de la globalización por aquello de las desigualdades, me dirijo hacía mi decathlon más cercano para comprar una tienda de campaña y ¡Ups! también necesitaré una caña de pescar. Así ya no tendré que pensar más en que el pez grande se come al pez chico, en que los más desprotegidos son los más débiles en esta crisis y todas esas mierdas. A partir de ahora, mi única preocupación será saber cuánto tiempo tardaré en pescar algo para subsistir en Tanzania.

Pero falta lo más importante...¡El billete de avión! Consulto en la página de Ryanair (Tirando la casa por la ventana) e intento buscar vuelo a Tanzania. Es a lo más que puede aspirar un licenciado en nuestro país, pero me temo que no tienen vuelo hasta Tanzania.

¿Y ahora qué hago?  Con la tonteria me he dejado un dineral en mis preparativos para el viaje y al final no podré irme. Pues nada, acudiré a una agencia de viajes y robaré un billete de avión ¡Viva la libertad!. JAJAJ Ser español por el mundo tiene sus riesgos, pero esto me parece un mal menor.

Así que me dispongo a apagar la tele, pero antes anoto el correo electrónico del programa para cuando lleve un par de meses en Tanzania venga un equipo del programa a grabarme y ver lo bien que me va en Tanzania. Os vais a morir de asco y envidia porque tendré una casa con con piscina. (Eso sí, no tendré peces)



Estoy pensando que a lo mejor no llega la conexión a Tanzania, pero bah, da igual, después de todo la que he tenido que montar para llegar hasta allí me doy más que por satisfecho.

Sólo un pido un favor ¡Grabarme en video cuando salga en ese maravilloso programa de la tele!

sábado, 14 de julio de 2012

¡Welcome Miss Merkel!


Corrían otros tiempos, dicen, cuando los españoles veían en los años 70 esas películas de pintorescos personajes, un poco paletos y falto de miras denominadas “españoladas”. Casi como un género propio, algunos entrañables actores como Alfredo Landa, Esteso o Paco Martínez Soría interpretaban a personajes un poco bobalicones que se dejaban sorprender por las costumbres extranjeras, las faldas cortas de las suecas y los Cadillac de lujo que paseaban por una España lúgubre, de rebajas y con una mentalidad algo cerradita.


Tradicionalmente denostadas, estas películas han servido para hacer una crítica a la sociedad española de la época y teniendo en cuenta la dictadura que aún se vivía, evidentemente había que sortear la censura para poder decir las cosas entre risas y chascarrillos, algo muy típico español.

La historia del cine a veces no es más que una réplica de la realidad. En esos ciclos de cine que ahora La 1 en un plan de austeridad demoledor para su audiencia, ha decidido volver a emitir, nos encontramos con situaciones similares a las que vivimos en la actualidad. Un buen ejemplo de ello es “Bienvenido Mr Marshall”, una película que recoge el entusiasmo de recibir a los americanos en un plan de “rescate” que sin eufemismos supuso la rehabilitación de parte de la economía española.



Desgraciadamente la historia se repite, aunque la gente por lo general no se muestra tan entusiasta en vitorear a los alemanes (que en este caso serían los nuevos estadounidenses). Ahora más que Cadillac portan Mercedes y un sinfín de condiciones para recuperar la estabilidad “ganada” entre ladrillos y castillos de arena.

Paradojicamente en esa época eran muchos los españoles que veían Europa como el progreso y el punto de mira para dar el salto e integrarnos con el resto. Ahora hoy muchos se cuestionan la cosa europea, mientras la tragedía griega, la prima de riesgo y los mercados hacen tambalear las ilusiones varias del llamado "proyecto común" para todos los europeos. 

Los nuevos emigrantes tampoco serán campesinos que deciden emigrar a otras tierras en la búsqueda de un futuro algo más digno, sino jóvenes sobradamente preparados que abandonan el barco porque hay demasiados piratas en el mar. Sin embargo, pese a todas las diferencias, la morralla política, la falta de perspectiva económica y los errores del pasado se vuelven a repetir. España, como cualquiera, tropieza dos veces en la misma piedra, o mejor dicho en el mismo iceberg –haciendo de nuevo un símil cinematográfico-

Hay que agradecer a La 1 la emisión de estas películas pues nos permiten revivir momentos pasados y hacer balance. Aunque los que están más agradecidos por el ciclo “cañí” que emite la pública es la competencia. Los datos del mes de junio dejan un balance desolados en la llamada “televisión de todos”. Menos del 10% de cuota de pantalla y por primera vez en años ha caido a la tercera posición. ¿Será que los españoles ya no son iguales que hace 40 años?

martes, 10 de abril de 2012

Las palabras no se las lleva el viento


Los últimos fallos en la política de comunicación que mantiene el Gobierno del Partido Popular con los medios y por ende, a la ciudadanía están causando más de un disgusto al Ejecutivo. Una situación que no está gustando nada en Genova y que está erosionando la imagen del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy y la de su equipo
.
Las impopulares medidas drásticas que están tomando los populares, solamente se están viendo ensombrecidas por el cruce de declaraciones entre los propios miembros del partido, causando una sensación de falta de unidad y de desconcierto, que nada ayuda a la imagen de España, en un momento donde el país está más en el punto de mira que nunca con la prima de riesgo por las nubes y la Unión Europea pendiente de las decisiones que se toman en nuestro país.

El anuncio de recorte de más de diez mil millones de euros en educación y sanidad se hicieron a través de un simple comunicado de prensa. ¿Quién dirige el gabinete de comunicación del Gobierno? La respuesta de los medios de comunicación ha sido unánime y la ya famosa “espantá” de Rajoy en el senado, dando esquinazo a los periodistas tampoco ayudan demasiado a crear una imagen de responsabilidad de Rajoy y su equipo.

Por otro lado, Luis de Guindos, ministro de Economía y Competitividad, sostenía hace unos días que la sanidad debía ser pagada por los contribuyentes incluyendo términos como “progresividad” además de hablar de “ajustes” sin siquiera precisar a qué tipo de reformas se refieren creando una confusión en la ciudadanía que contribute a la imagen de oscurantismo de información en el que se ha sumergido el equipo de Rajoy. Tampoco se puede olvidar las promesas del presidente en campaña prometiendo que los dos estandartes tradicionales del llamado Estado de Bienestar no se iban a tocar, seguido de las jubilaciones. Por ahora, los hechos desmienten a las palabras.

El término “copago” también ha sobrevolado la cúpula del Gobierno con desigual fortuna.  Carlos Floriano, vicesecretario de Organización del PP, desmentía en una entrevista en Los Desayunos de la 1, que De Guindos sugería un “pago de algunos servicios” por parte de los contribuyentes con rentas más altas, afirmando que se tratabas de una “opinión personal” del ministro de Economía. Unas palabras que debieron ser medidas, precisamente por el alto cargo que De Guindos ocupa. 

Tampoco ayuda demasiado que hable de estas reformas en sanidad en declaraciones a un periódico aleman, y que los españoles nos enteremos más tarde que en el extranjero de las decisiones que el Gobierno plantea tomar. 

A nivel autonómico tampoco estamos a salvo de la discordancia entre lo que se dice y luego se hace. Esperanza Aguirre, en una rueda de prensa con motivo de su entrevista con Mariano Rajoy, aseguraba que no se iban a subir las tarifas del metro de Madrid porque ya subieron “hace poco”. Hoy mismo también se ha conocido que a partir de Mayo se aplicará la mayor subida de los últimos 10 años en la tarificación, algo que resentirá notablemente el bolsillo de los madrileños.

La ciudadanía muestra su descontento con la falta de información sobre asuntos de importancia y el Gobierno se resiente por los mensajes contradictorios que lanzan, sin tener en cuenta las consecuencias de estas acciones. En época de austeridad, no es bueno hacer recortes en la comunicación, pues es la base de la democracia. O eso dicen…

martes, 6 de marzo de 2012

La crisis, con humor, es menos crisis


¡Pánico en las bolsas! El Ibex 35 marca mínimo histórico. ¡Última noticia! Las Comunidades Autónomas cada vez son menos autónomas, deben hasta en el Carné de identidad. La crisis seguirá hasta 2014…por lo menos. El mundo se acaba en noviembre de 2012. El Estado del Bienestar está en peligro. 

Ahhhhh….STOP

El bombardeo que nos someten a diario todos los medios de comunicación puede producir la mayor depresión de los españoles, que ríete tú de la del Ebro. Menos mal que en España contamos con una receta que aunque no nos va a quitar la crisis de encima, si nos hace llevarla en otro tono.
¿Se trata de una receta milagrosa?, ¿Se trata de un plan de choque para reactivar –por fin- la economía española? ¿Quizás estamos hablando de un convenio con los chinos para que nos compren hasta las uñas de los pies? 

NO, estoy hablando de otra cosa mucho más cercana que los asiáticos, y es algo tan típico nuestro como es el humor. 

Si hablo de este tema no puedo dejar de hablar de un personaje que me tiene totalmente cautivado, como es el twitter de “Espeonza Aguirre”. No, no es una errata. Se trata de un perfil  de ficción que habla a diario en tono de sorna sobre los temas más variopintos, esencialmente políticos, marcados por la ideología neoliberal, de la siempre guerrillera presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

Haciendo guiños a los recortes en educación, hace una lectura mordaz, atrevida y en ocasiones cojonera de una realidad que si no fuera por estos pequeños ratos se nos haría oscura. Paradójicamente, el humor negro de Espeonza me hace echarme unas risas frente al ordenador con frases tan delirantes como “Espe, puedo hacerte unas preguntas sobre la Sanidad? –No, que yo de cosas privadas no hablo ¡JAJAJA! La mejor tarjeta sanitaria es la Visa jajajaj me desorino”.

Espeonza toca todos los palos y también incluye a la alcaldisima de Madrid, Ana Botella.
“Hablé con Ana Botella. ¿Cuál es la mejor receta para encontrar trabajo?. “Casarse con Aznar” todo ello seguido de su inconfundible JAJAJA

Ésta última también tiene un twitter no oficial (por cierto, con más seguidores que el auténtico) llamado Ana Botellón, con unas cuantas perlas donde hacen chistes con sus problemas con las peras y las manzanas o también sobre la llamada boina de contaminación que rodea la ciudad de Madrid.

Y es que aunque a diario pensemos, nos cabreemos e indignemos con todos estos asuntos, a veces tomarse las cosas con humor nos hace pensar que aunque sea unos instantes podemos ser felices. Definitivamente, la crisis con humor…es menos crisis.

lunes, 27 de febrero de 2012

Los colores de Andalucía


Yo que soy muy dado a las conmemoraciones, no puedo dejar de pasar una fecha tan señalada en el calendario para mí como es el día de Andalucía. Un día especial, donde evoco con cierta añoranza los rincones y momentos que he tenido la oportunidad de vivir en esta tierra desde mi niñez.

Hablar de Andalucía para mí es hablar de momentos de la infancia. Me vienen a la memoria las celebraciones que hacía en el patio de colegio cuando apenas tenía 9 años. Para recordar aquel día hacíamos un pequeño homenaje a nuestra tierra que consistía primero en un desayuno típico a lo andaluz. Una “tostaita” con un “chorreonsito” de aceite de oliva y azúcar endulzaban la mañana.

Trascurrido el desayuno, llegaba el momento más intenso que se vivía todos los 28 de febrero.  Era entonces cuando se elevaba en un pupitre verde del patio del colegio Don Santiago, el profesor de música del cole, que aún lo recuerdo como si hubiese sido ayer, dirigía con su batuta a todos los pequeñajos que allí nos encontrábamos para que todos cantáramos el himno de Andalucía.  Se ponía serio y riguroso, poniéndole empeño y entusiasmo para tratar de transmitirnos la fuerza que aquellas palabras nos querían decir y que de alguna manera marcaron el resto de nuestra vida.

Por aquel entonces no entendía demasiado bien el significado de aquellas palabras que recitaba aquel profesor con tanto énfasis. “Andaluces levantaos”. Ahora con unos añitos más entiendo el significado de esas palabras. Si algo nos caracteriza a los andaluces es precisamente en levantarnos y luchar contra las adversidades ya sea en nuestra tierra o en cualquier otra para demostrar esa fortaleza forjada en años de historia y batallas varias.

En esta fiesta donde conmemorabamos el día de Andalucía también portaba mi estuche con colorines para pintar la bandera y trataba de esmerarme con cuidado y sin salirme del trozo de papel para colgarlo con orgullo en la pared de la clase. Escogí dos colores que me iban a marcar por siempre, el verde y el blanco. Para mi todavía simbolizan recuerdos, pureza y un cúmulo de sensaciones díficiles de describir en palabras.. 

Esos colores iban a teñir por siempre mi alma de una forma distinta de ver las cosas. Sin quererlo iba pintando a lo largo de los años un respeto por una tierra trabajadora. También aprendí nuestro pasado andalusí, la tierra de las tres culturas por excelencia. Cuna de grandes filósofos, historiadores, poetas y músicos que sentaron sus cimientos en Andalucía y todos fuimos recompensados por un legado insustituible. También conocí con el tiempo la belleza de mi Córdoba, las ruinas romanas, el mestizaje y una manera de vivir distinta, tan criticada y envidiada a la vez.

 Con el tiempo aprendería que esos colores simbolizan una forma de entender la vida, llena de ilusiones y un deseo que cumplir. Hoy, 15 años después de aquel día, confío en que algún niño como yo por aquel entonces coja sus lápices y vuelva a pintar la bandera de blanca y verde Seguro que como yo hace algunos años jamás olvidará este día…

¡¡FELIZ DÍA DE ANDALUCÍA!!

martes, 10 de enero de 2012

El Metro desde otro punto de vista


El Metro de Madrid se ha visto envuelto, como muchos ya sabéis, en una polémica en torno al precio de los billetes univiajes comparándolo con el de las principales ciudades del mundo (Nueva York, Londres o París) entre otras muchas, más que nada porque no se puede comparar el tren de vida de estas ciudades y los salarios mínimos interprofesionales.

Al margen de los datos, que evidencian una información sesgada y que ha sido denunciado por algunos de los usuarios, mi experiencia por el Metro de Madrid, ciudad donde resido desde hace cuatro meses, no ha sido mala. Es cierto que funcionan con bastante frecuencia y une bastante bien una ciudad, que es a priori, lo que se podría esperar de un servicio como este.

Hasta ahí bien. Si bien es cierto, que el metro es por excelencia un lugar de paso, donde el tráfico de pasajeros, las prisas y porque no decirlo, la sensación de formar parte de un ganado que recorre en manada los pasillos con un apetito voraz de prisa que, en algunos casos, parece insaciable. En los pasillos del Metro, a modo de laberinto, nadie sabe bien donde va, pero todo el mundo mira hacia delante y sigue los pasos, con esperanza de encontrar una salida que le saque de las cloacas de la ciudad. Entiéndase cloacas, por encontrarnos en el subsuelo.

Sin embargo, no hay nada que merezca la pena en el Metro que resulte reseñable. Todo es tan medible, previsible y sin magia que me hacen extrañar otros metros como el famoso y más antiguo Tube de Londres. Aunque más eficaz que el de la capital británica (sin cortes los fines de semana y notablemente más económico) no hay huellas en los recovecos de los pasillos. Todo es neutro, las estaciones completamente iguales y sin duda, los pocos músicos que abarrotan las entrañas del Metro de Madrid no tienen la chispa que se encuentra en el Tube de Londres.

Los  viejos saxofonistas del metro, hacen transportarnos mientras vamos con prisa por el mundanal tumulto de gente y agobio, recordándonos que hay vida más allá de nuestros acelerones.  Echo de menos el encanto y la magia que encontré allí, ya que uno va buscando desplazarse rápido para llegar a la parada y se encuentra que el mejor viaje lo puedes encontrar en cualquier esquina, recoveco de bajo tierra y eso, visitantes de la travesía, no se paga con nada en el mundo. Allí se lo toman en serio y en cada estación encontramos un mural diferente, que nos hace deleitarnos la vista y olvidarnos del agobio. La estación de Charing Cross es un buen ejemplo de ello, aunque no es la única ni mucho menos. Que tomen nota los de Metro de Madrid. Seguro le dará mejor resultado que la campaña con la que nos bombardean a diario en sus asépticos túneles y vallas publicitarias de la siempre estresante capital madrileña. 


Tomarlo con calma y abrir vuestros oidos. A veces, los mejores viajes, se hacen sin moverse... ¡Buen viaje!

viernes, 6 de enero de 2012

Súmate al cambio....para seguir igual

En la anterior entrada hablaba de renovarse o morir. De la necesidad de hacer cambios para seguir caminando. Y pensándolo bien, me ha quedado algo muy similar a lo que prometía el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy durante su campaña. El foco mediático ha matado a fogonazos las promesas que nos hizo el máximo dirigente del PP para ganar las elecciones.

Porque por desgracia si de algo ha servido esto de la crisis ha sido para agarrarse a un clavo ardiendo. La necesidad, el paradójico miedo a cambiar los cimientos de un sistema que se tambalea por si mismo ha sido aprovechado magistralmente por el ahora si, presidente del Ejecutivo. 

Sin embargo, la hasta ahora cabeza visible del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría explicaba las reformas que se habían visto obligados a hacer porque la situación, visitantes de la travesía, es complicada. La deuda es ahora dos puntos más de lo esperado, y ¿saben quien va a pagar los platos rotos? TATATAN... Vale, no tenia mucha intriga. Las clases medias con las subidas de impuestos y aquellos que pierden valor adquisitivo al verse congelado el salario mínimo profesional. Total que unos cuantos millones de votantes se unieron, algunos muy animados tras el desastre zapateril y otros arrastrados por ese clavo ardiendo del que hablaba, a la marea azul. Aquella que era liberal, que promulgaba por ayudar al empresario medio y bajar o mantener los impuestos para incentivar la economía.nos ha dado la primera en la frente.

Aquellos que se sumaran al cambio habrán dicho, ¿para qué?. El, a mi juicio y nótese la ironía de mis palabras, presidente fantasma (porque no aparece por ningún lado, aunque de vez en cuando se manifiesta en forma de susto para las clases medias) nos ha hecho sumarnos a un cambio para que todo permanezca igual. “Subir los impuestos provocan un estancamiento de la economía”, “La crisis no la soportarán las clases trabajadoras”. Gato por liebre le dieron a más de uno, que se llevaría las manos a la cabeza cuando han visto este despropósito. Como mago con chistera esperábamos muchos españoles las medidas para sacar al país de esta hecatombe económica (Gracias Piqueras) y nos hemos encontrado con que todo sigue igual.

España, dime qué hemos hecho contigo porque no te reconozco…¿o quizás si?

Cambiar para seguir adelante

Volver a empezar otra vez. Esa era la idea que tenía cuando he querido darle un giro al blog. Este proyecto que surgió como algo meramente académico se ha convertido, pasado ya un año desde que este blog “echó a andar” en un lugar donde expresar ideas, pensamientos, siempre con la música como telón de fondo.

Pero si bien es cierto, que en el periodismo, como todo en la vida hay que seguir la máxima de eso de “renovarse o morir” y si es cierto que gracias a los que de vez en cuando dais un vistazo he decidido hacer una serie de cambios. El más evidente es el visual, el anterior fondo era a veces demasiado molesto con el solecito enmedio y ahora la página es mucho más sencilla y con un diseño que parece como una revista (las gracias se las dais a blogspot, que ha mejorado bastante el tema de los diseños desde que empecé a escribir).

Por otro lado, la dinámica de temas será más amplia (si cabe) y las historias y los temas de actualidad que he ido introduciendo en los últimos posts, se harán más visibles. En definitiva, que espero que os gusten los cambios porque aunque esto de ponerse a escribir corre por cuenta de uno, cada uno aporta su granito de arena a las historias. Sin más pretensiones, sigo andando, que tengo mucho que contar.